Chicos de Garupá escribieron cartas en las que mandan fuerza y apoyo a los sirios

Cuatro cartas escribieron los chicos del barrio Santa Clara II, Garupá,  que concurren al Centro de Apoyo Escolar del Partido de la Participación Ciudadana (PPC). Las maestras abordaron el tema de la guerra en Siria y los chicos expresaron de este modo su sentimiento. Estas cartas con otras más estarán expuestas mañana en el Plaza 9 de Julio, en el marco de una jornada por la paz que se realiza allí.

Son chicos muy humildes que acceden a este beneficio de la «maestra particular», gracias a la iniciativa del PPC que lleva 5 años de trabajo ininterrumpido. Actualmente concurren más de 120 chicos de distintas edades, a las clases que se dictan en ambos turnos los lunes, miércoles y viernes.
Si bien en esas cartas podrán notarse errores ortográficos y en algunos casos las correcciones que le hicieron las maestras y que serán abordadas en la jornada de hoy cuando vuelvan a clase nuevamente. En las clases no se da solo lengua, matemáticas y las áreas donde los chicos tienen problemas en el aula. También las maestras le hablan de esta actualidad lejana, que nos preocupa mundialmente. Incluso al comenzar cada turno, los niñitos realizan una oración pidiendo por la paz en el mundo.
El centro de apoyo escolar comenzó a funcionar hace 5 años. El PPC lo armó en respuesta a un pedido que realizaron las madres del barrio, pues estaban preocupadas por la repitencia y el abandono escolar. Se sostiene gracias a los aportes de los afiliados y dirigentes del PPC. Primero fue un toldo con unos improvisados bancos, hoy es una estructura de material, con baño, bancos, ventiladores y mucho corazón. Este año también recibió el apoyo del vicegobernador, Hugo Passalacqua, quien vivenció en el barrio lo que se hace aquí.
Esta iniciativa de la maestra particular gratuita, fue reconocida nacional e internacionalmente, incluso se recomendó su extensión en los países en vía de desarrollo. El presidente del PPC, José Garzón Maceda, en un defensor de la educación pues la considera promotora de la inclusión y equidad social. Con esto, más de 45 chicos se reinsertaron al ciclo escolar, dejando las calles y los peligros que en ella encontramos en esta periferia del Gran Posadas. 
Por el éxito de esta iniciativa, el PPC armó otro centro de apoyo escolar en el barrio Prosol I que está funcionando desde el lunes pasado. «Si los chicos de clase media, media alta y alta, tienen la posibilidad de contar con una maestra particular cuando no alcanzan los objetivos, a los chicos de barrios humildes les cabe el mismo derecho. Por eso nosotros estamos aquí con este convencimiento», repite Garzón una y otra vez mientra supervisa las tareas.

 

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