Intentaron fugarse cuando llegaron los inspectores a controlar al Grupo Kabour SRL, uno de los principales exportadores de la tradicional infusión argentina. Mantenían llamativas reuniones nocturnas con gente de Paraguay y Brasil. Nadie quiere declarar sus actividades, ni el encargado de la empresa, aunque reconoce que «trabajaban» allí en el envío de contenedores a Medio Oriente.
A pocos días del descubrimiento de trabajadores en condiciones infrahumanas en campos de Ramón Puerta en Misiones y otras irregularidades en Corrientes, con gente hacinada y en condiciones laborales deplorables, la policía del Trabajo sumó otra sorpresa mayúscula, esta vez en el norte de Misiones, en una finca pegada al límite con el Brasil.
En la localidad de Andresito, al inspeccionar al Grupo Kabour SRL, una de las más importantes empresas exportadoras de yerba mate de Argentina, la policía Laboral se encontró con tres ciudadanos sirios trabajando clandestinamente, quienes, tras ser sorprendidos por los inspectores, primero intentaron fugarse, y ante la imposibilidad de hacerlo, trataron de negar su vinculación con la empresa, aunque no supieron explicar la situación irregular en la que se encontraban trabajando ni las tareas que desempeñaban.
Se trata de los ciudadanos de orígen Sirio AL Qadri, Kalcush Masud y Hanna Monsor, todos llegados de Yabrud, quienes se negaron a contestar ante el requerimiento de las autoridades cuál es el tipo de tareas que realizaban en el Grupo Kabour SRL.
La policía de Trabajo también recibió la negativa del apoderado de la empresa, Omar Kassab, quien no quiso informar sobre las actividades que desarrollan los árabes en la compañía. Ahora las actuaciones laborales serán derivadas a la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) para que determine el grado de responsabilidad de la empresa y de los extranjeros ya que, según testimonios de vecinos de la zona, se encontraban en forma irregular, no solamente en la empresa sino también con actividades que llamaban a sospecha. Entre ellas, con reuniones nocturnas con gente que llegaba desde Brasil y Paraguay, de la zona de la Triple Frontera, que según vecinos de la zona, cruzaban clandestinamente la frontera.
Las actuaciones también serán giradas a Gendarmería Nacional y a la Justicia Federal para que se investigue la ilegalidad o no de las actividades desplegadas por los sirios, que según testimonios con los que se encontró la policía Laboral, se dedicaban a cargar centenares de contenedores con rumbo a medio oriente en los últimos años.
Finalmente los sirios no supieron explicar los motivos de su estadía en el lugar ni las actividades que desplegaban aunque los vecinos del lugar aseguran que impartían órdenes de manera imperativa, cuasi militar. Las fuentes de Trabajo confiaron que provienen de la región Yabrud, una las más calientes en esa conflictiva parte del mundo.
Los insólito del caso es que los árabes no quedaron detenidos, aunque si supeditados a les investigaciones que buscará determinar el tipo de actividades ya que no tiene autorización laboral y llama la atención su permanencia en un lugar tan inhóspito y alejado del país.
