La madre de la menor de 14 años abusada por su tío, manifestó que desde el hospital Materno Neonatal “me dijeron que realizarle un aborto a mi nena (que ingresaría a la semana 13 de gestación) es muy peligroso”. La Justicia todavía no había decidido si autorizaba la interrupción del embarazo
La madre de la menor de 14 años desistió de interrumpir el embarazo producto de una violación “para no poner en riesgo la vida” de la jovencita que ya entró en la decimotercera semana de gestación.
La madre, entre sollozos manifestó que desde el hospital Materno Neonatal “me dijeron que realizarle un aborto a mi nena es muy peligroso”.
La mujer confirmó que retiró la solicitud ante la Justicia ya que «quiero resguardar la salud de mi hija». Ante la posibilidad de entregar el niño en adopción, consideró que aún «es pronto para hablar de eso. Primero vamos a tratar de que ella pase bien su embarazo».
La mujer contó que con su marido decidieron no seguir adelante con el pedido a la Justicia, porque “los médicos le dijeron al Juzgado que esa operación es muy peligrosa y nosotros nos debíamos hacer responsables si algo salía mal, y por eso preferimos preservar su vida”.
La chica de 14 años y que está cursando el 6º grado, pero hace una semana no va a la escuela, ayer seguía internada en el Hospital, y “está bien”, según contó en breves palabras la hermana mayor, y agregó que su madre, ayer en horas de la tarde se encontraba con problemas de presión en su domicilio y no quería hablar con la prensa. También admitió que les llamaron de la Red de Familia para ofrecerles ayuda.
A través de una carta, la Red Federal de Familias indicó que “nosotros queremos decirte a vos, joven que estás pasando por esta problemática situación, que nos permitas ayudarte; sabemos de tu dolor y queremos lo mejor para vos y para ese bebé que llevas dentro, queremos que conozcas el testimonio de chicas como vos que afrontaron situaciones similares a la tuya y que ahora no se arrepienten de haber dejado que nazca su niño”, subrayó la Red Federal de Familias, y expresó su disposición a adoptar a ese niño antes de que se realice un aborto.
La organización transmitió que “cuenta con profesionales dispuestos a acompañarla”. Entre otros, psicólogos para “brindarle apoyo en el área emocional” y “médicos que pueden ayudarla en el desarrollo del embarazo”, a fin de que pueda “sobrellevar la difícil situación que le toca vivir”.
Por su parte, el ministro de Salud Pública, José Guccione, reclamó mayor celeridad a la justicia y sostuvo que los médicos del hospital “no realizarán ninguna intervención porque el caso ahora se ha judicializado”.
La demora judicial
La jueza de Menores, María Julia Alegre, se había negado a través de una resolución a autorizar el pedido de aborto por parte de la familia de la menor violada, cuyo tío está detenido, acusado de la violación de ella y de su hermana, de 10 años.
Estaba en curso una apelación que ahora quedará abstracta ante la decisión de la familia de continuar con el embarazo.
La discusión sobre el aborto no punible aparece cada tanto a nivel nacional cuando los médicos o familiares piden autorización judicial, aunque la doctrina y fallos precedentes indican que no es necesaria la intervención de un juez para que procedan esas intervenciones.
El artículo 86 del Código Penal argentino establece que el aborto no es punible “si se ha hecho con el fin de evitar un peligro para la vida o la salud de la madre y si este peligro no puede ser evitado por otros medios; y “si el embarazo proviene de una violación o de un atentado al pudor cometido sobre una mujer idiota o demente”.
En este caso, el tío de la menor está detenido por la violación a ella y su hermanita.
