Finalmente, en materia política, trazó un análisis sobre el año electoral que se cierra y el resultado de las tres elecciones realizadas en Misiones. “En 2003 todos sabíamos que había que hacer algo nuevo. Que había cosas que no podían volver más, como viejas estructuras que no nos contenían, que había que defender intereses de lo misioneros con más fuerza”.
“La Renovación fue un armado sin el cálculo de lo que iba a ser. Se fue armando. Y sigue siendo unidad política en formación y de maduración y está bueno que así sea. Con capacidad de adaptarnos y una marca registrada que es esto de ser un proyecto misionerista. En Buenos Aires nos atienden porque saben que tenemos votos en el Congreso. Yo no me callo, digo las cosas, con respeto, las cosas que no me gustan las digo. No extorsiono ni digo por los medios”, expresó.
Sobre las elecciones legislativas del 30 de junio indicó que “hubo dos provincias que desdoblamos y no nos fue bien”. “La atomización hizo que se reparta mucho el voto y también hubo algunas cuestiones estratégicas”.
“No podemos copiar y repetir los errores de los partidos, la soberbia, el aparato, el aparato lastima. Eso no suma, resta porque el misionero es soberano. Ni pasacalles, ni gigantografías o jingles suman. La Renovación debe volver al contacto directo. El aparato es refractario. Por eso cada vez, mis actos tienen menos protocolo y más en el llano. Que el ciudadano no vea que llega el poderoso con su aparato”, opinó.
En esa línea, advirtió que “tenemos que reinventarnos, porque ya no somos lo nuevo”.
Closs anunció que no habrá cambios en el Gabinete pero tampoco les garantizó el sillón a sus ministros y habrá movimientos en las subsecretarías. “La idea es que si un ministro debe ser fusible, lo deberá ser. Debemos generar lar transiciones que sean necesarias para armar al próximo gobernador que esperamos que sea renovador”, sostuvo.
“La autocrítica, es no haber tenido la suficiente capacidad para que Misiones entienda los valores de la convivencia, el respeto. EL misionero es bueno, respetuoso, digno. A veces copiamos y nos pusimos agresivos, patoteros. Debíamos haber tenido más presencia en esos valores”, admitió.
Sobre el escenario electoral nacional, consideró positivo que el oficialismo comience a tener a nombres fuertes para la sucesión de Cristina Fernández. “Es bueno que tengamos dos hombres como Daniel Scioli o Jorge Capitanich. El camino corto es Scioli, hay que cuidarlo, protegerlo, no punzarlo como se hizo”.
“Tengo una relación de afecto con Capitanich, algunos dicen que está en un lugar de desgaste, pero si le sale bien, aparece como una persona con capacidad de gestión. Sabe que si se sigue aumentando la curva de salarios, las provincias nos transformamos en inviables. Debemos hacer que crezca la economía. Capitanich conoce las provincias. Que él que te escuche, conozca las experiencias, para nosotros esto es muy bueno”.
Me pone contengo que tengamos dos buenos candidatos con perfiles distintos. Son buenos tipos, respetuosos y mesurados. No van a hacer implosión del sistema. Voy a trabajar por eso. La Renovación piensa para ese lado, pero como lo dije, puede haber personas que tengan una visión distinta a nivel nacional. En la Renovación es probable que puedan pensar distinto”, reconoció.
Closs: “Debemos contener al Estado para no perder calidad de servicio”
